Feminismo o igualdad: ¿conceptos amigos o enemigos?

El pensamiento feminista ha sido polémico desde su nacimiento, situado por muchos al inicio de las Revolución Francesa y especialmente potente a partir de la Revolución Industrial. ”Feminismo” es un término confuso por la sencilla razón de que no existe un único movimiento feminista, sino múltiples. Tanto hombres como mujeres se han sentido en tierra de nadie ante tanta amalgama ideológica, abogando por encima de todo por el concepto de igualdad de género. Pero, en realidad, ¿feminismo e igualdad son términos alejados o cercanos?

Quién no ha escuchado alguna vez la frase: “ni machismo, ni feminismo: igualdad”. Y lo cierto es que existe tanta confusión al respecto del movimiento feminista que en cierto modo es lógico que tanto hombres como mujeres puedan llegar a pensar que “feminismo” e “igualdad” son dos términos alejados.

Independientemente de la posición que asuma cada persona ante el movimiento feminista (derecho a opinar tenemos todas y todos) hay que aclarar dos premisas fundamentales:

  1. “Feminismo” no es lo contrario de “machismo”.
  2. El contrario de “feminismo” es “hembrismo”.

Y al hilo de lo anterior:

  • “Machismo” es la idea de supremacía o poder del género masculino frente al femenino, lo cual puede ser visto desde un punto de vista biológico, económico, social y/o cultural.
  • “Hembrismo” es la idea de supremacía o poder del género femenino frente al masculino.

Y entonces… ¿qué es feminismo?

De acuerdo con la Real Academia Española, existen dos acepciones (y copio textualmente):

  1. m. Principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre.
  2. m. Movimiento que lucha por la realización efectiva en todos los órdenes del feminismo.

Según la primera definición, que sin duda es la más aclaratoria, el feminismo aboga por el principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre.

Feminismo e igualdad de género son dos términos claramente unidos, increíblemente amigos, de modo que, podríamos dar este artículo por terminado ya que la pregunta que lo ha iniciado está contestada. Ahora bien, la realidad es mucho más compleja…

¿Cuántos feminismos existen?

La polémica respecto al feminismo tiene su raíz en la segunda definición de la RAE: “movimiento que lucha por la realización efectiva en todos los órdenes del feminismo”, es decir: movimiento que lucha por la realización efectiva en todos los órdenes del principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre.

Y aquí es donde viene el problema: a lo largo de la historia del movimiento feminista se han dado múltiples formas de luchar por la igualdad e incluso a veces de manera simultánea, como sucede en la actualidad.

Existen muchos estudios sobre las múltiples corrientes ideológicas del feminismo y su evolución a lo largo de la historia, y son muy complejos como para plantear aquí una amplia disertación. Desde la Revolución Francesa, a las sufragistas, desde Simone de Beauvoir y su “Segundo Sexo” hasta el feminismo liberal, el radical, el materialista, el cultural, ecofeminismo… la lista del movimientos es larga y compleja.

Las olas del feminismo

Es interesante saber que las diferentes etapas por las que ha pasado el movimiento feminista han sido clasificadas como “olas”. Actualmente se distinguen cuatro olas que nos pueden ayudar a simplificar el movimiento feminista gracias a los cambios que ha experimentado según el momento histórico que se vivía.

La primera ola:

Surge a mediados del s. XVIII, desde el inicio de la Revolución Francesa en adelante. Su principal hito es alcanzar la igualdad de derechos civiles (surge por primera vez la idea de sufragio femenino)

La segunda ola:

Desde mediados del s. XIX hasta los años 50 del s. XX. El movimiento se centra en la lucha por el derecho a voto (las famosas “sufragistas”), pero también en el acceso a la educación y en el cuestionamiento sobre la violencia de género, los derechos reproductivos y la violación conyugal.

La tercera ola:

Surge en la década de los 70 del s. XX. Plantea un cuestionamiento cultural, la necesidad de liberarse de los modelos tradicionales de familia sustentados en medidas legislativas patriarcales. También es la ola de la “liberación sexual”.

La cuarta ola:

Es el momento que vivimos ahora. Su lema: “lo personal es político”. Ahora bien, esta ola define el momento de mayor diversificación del movimiento. Un feminismo más rico, pero también más complejo.

Pero no olvidemos lo importante:

“Un feminista es cualquier que reconozca la igualdad y plena humanidad de mujeres y hombres”.

(Gloria Steinem)

Si te ha parecido interesante el artículo y deseas contactar conmigo, mándame un mail a pilar@aireservicios.com o puedes llamarme al 91 563 52 52

Pilar Benítez, mujer todoterreno

Traductora jurada y amante del poder de la palabra