Septiembre es un mes crucial para muchas personas. Terminamos las vacaciones y volvemos a la rutina. Tenemos que volver a enfrentarnos a nuestro trabajo, y en esa situación podemos sentirnos con las pilas totalmente cargadas o todo lo contrario, completamente estresados. ¿De qué manera podemos hacer frente a la llamada “depresión postvacacional”? ¿Cómo podemos volver a trabajo motivados y enérgicos?
Sí, el verano es maravilloso. Con un poco de suerte has tenido tiempo para desconectar, dejar las rutinas, disfrutar de tu familia o amigos, viajar a algún destino exótico… Pero llegó septiembre y toca retomar de nuevo la rutina, la vuelta al trabajo, y tú te preguntas: ¿Por dónde íbamos? ¿Dónde nos habíamos quedado?
Lo más seguro es que al principio te sientas apabullado, es muy probable que tu empresa no se haya detenido con tus vacaciones y quizás el número de tareas pendientes es algo mayor de lo normal. Además, con las pilas cargadas, es habitual que surjan nuevas iniciativas por tu parte, por la de tus compañeros o por la de tus jefes, así que… el trabajo se duplica, y entonces…. Ya está aquí, apareció el estrés postvacacional. ¿Cómo lo puedes controlar?
Según los estudios, la falta de descanso en vacaciones o reajustar los horarios son las principales causas del estrés posvacacional, que afecta nada más y nada menos que a un 67,91% de los españoles aproximadamente. Vamos con algunos consejos para evitarlo
1.Mantén una actitud positiva
Sí, claro, es cierto que estabas mejor de vacaciones, disfrutando de tu tiempo libre pero, pregúntate… ¿te gusta tu trabajo? ¿Estás satisfecho con lo que haces? ¿Te sientes afortunado por tener una forma de ganarte la vida?
Si algo no te gusta, cualquier momento es bueno para cambiarlo, y si lo has elegido, disfruta de ello.
Intenta no caer en la negatividad, quejarte de las tareas, sonríe y mantente relajado, una actitud positiva cambia la manera en la que hacemos las cosas.
2.Respeta los horarios del trabajo
Pasar de la noche a la mañana de no hacer nada a querer hacerlo todo puede ser un objetivo frustrante, así que, para adaptarte correctamente a la vuelta al trabajo, respeta tus horarios laborales, no hagas horas extras desde el primer día, deja que el cambio sea escalonado antes de cargarte con todo el trabajo pendiente.
3.Empieza por las tareas más agradables
Si empiezas a trabajar sumergiéndote en proyectos complejos o poco agradables es posible que se te haga cuesta arriba. Mejor empieza por tareas sencillas, por las cosas que te resultan más agradables. ¿Imaginas que un niño empezara el cole con un examen sorpresa el primer día? No te exijas tanto…
4.Planifica
La planificación siempre es un buen aliado. Cuando volvemos a nuestra rutina laboral nos encontrarnos en el momento perfecto para reorganizarlo todo, rediseña tu trabajo, establece objetivos y marca un calendario. El orden ayuda a trabajar de forma más efectiva y relajada.
5.Descansa y disfruta de tu tiempo libre
Bueno, y esto es lo más importante, no todo va a ser trabajar, ¿no? Muévete, haz ejercicio, apúntate a esa actividad que siempre has querido hacer: reserva unas horas para ti. Que la vuelta al trabajo no acabe ni con tu vida social, ni con tus planes, ni con tu desarrollo personal, ni en septiembre, ni nunca.
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Pilar Benítez, mujer todoterreno
Traductora jurada y amante del poder de la palabra
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