Reina de Afganistan. Soraya Tarzi

La primera reina de Afganistán: conoce a Soraya Tarzi

Desde que el pasado 15 de agosto los talibanes conquistaron Kabul, se teme que vuelvan a imponer la ley islámica “Sharía”, donde los derechos de las mujeres y niñas quedan completamente violados y relegados a la voluntad del hombre. 

Echando la vista atrás a la historia de Afganistán, descubrimos como hubo un tiempo donde las mujeres y niñas afganas tenían derecho a decidir, sin estar condenadas al silencio y a las vejaciones continuas.

¿Quién es Soraya Tarzi?

Soraya Tarzi nació el 24 de noviembre de 1899 en Damasco, Siria. Su padre, Mahmud Tarzi, era un intelectual afgano conocido por ser un hombre muy avanzado a su tiempo, hablaba varias lenguas y tenía unas ideas muy liberales. 

Gracias a esto, Soraya creció en un ambiente donde intelectuales de todo el mundo musulmán con nuevas ideas cosmopolitas pugnaban por deshacerse de las ideas reaccionarias del puritanismo más arcaico.

Años más tarde, el rey afgano Habibullah Khan permitió a la familia Tarzi regresar al país tras su exilio, y éstos se instalaron en Kabul. 

En 1913, Soraya se casó con el príncipe heredero Amanullah, pero por ese entonces lo de ser rey o príncipe era relativo, ya que no tenían plenos poderes. No fue hasta 1919, y tras la consecución de la independencia plena del protectorado británico, cuando Amanullah se convirtió en rey de pleno derecho. 

Desde un primer momento, la ya reina Soraya comenzó a hacerse un hueco en los libros de historia como la primera consorte musulmana del mundo en aparecer públicamente al lado de su marido. Asistía a reuniones de gobierno, aparecía en actos sociales y vestía ropa occidental. Además, entre otras muchas cosas, se dejaba fotografiar e incluso cazaba a caballo con Amanullah.

Lucha por los derechos de las mujeres

Educación

Soraya era conocida como la ministra de educación, además de la reina de Afganistán. Así lo solía decir el rey Amanullah Kahn durante los años que ostentó el poder en el país árabe.

“Yo soy su rey, pero la ministra de educación es mi esposa, su reina”

Defendió sin descanso la educación femenina en un país donde predominaba la moral ultraconservadora y las costumbres ancestrales. 

Gracias a esto, consiguió abrir la primera escuela para niñas y predicó con el ejemplo al permitir que sus dos hijas mayores asistieran y recibieran una educación. Además, fundó la primera revista femenina de Afganistán: “Ershad-I-Niswan” o “Guía de Mujeres”.

“La independencia nos pertenece a todos y por eso la celebramos. ¿Creéis que nuestra nación solo necesita hombres que la sirvan? Las mujeres también debemos formar parte”

Estas fueron las palabras que pronunció durante uno de sus discursos en 1926, aludiendo a que todas las mujeres debían intentar adquirir tanto conocimiento como fuera posible. De esta manera, podrían prestar sus servicios a la sociedad de la misma forma que lo hicieron las mujeres en los inicios del Islam. 

Uso del velo y monogamia

Comprometidos con la educación y la modernización del pueblo, la ejemplar pareja de reyes no solo hizo campaña en favor del derecho a la educación, sino también contra la obligatoriedad del velo y la poligamia.  

“Las mujeres no deberían usar velo y los hombres deberían tener una sola esposa”

Después de uno de los discursos que dio su marido, Soraya se quitó el velo en público, gesto que imitaron también otras mujeres después de ella. 

Por otro lado, Tarzi también convenció a su marido para impulsar leyes a favor del divorcio y para establecer cortes seculares en vez de tribunales de sharia. 

La gira Europea que supuso el final

En 1928, la pareja inició una gira europea cuyo objetivo se centraba en la búsqueda de referencias para promover reformas sociales y culturales en el país.

Según fuentes de la BBC, las fotos y las apariciones de la reina sin velo, rodeada de hombres extranjeros y luciendo un vestido sin mangas provocaron una reacción visceral en los sectores más conservadores del país. Estos se sublevaron contra ellos, lo que hizo que el reinado de Amanullah y Soraya llegara a su fin, evitando una Guerra Civil.

Poco después, las escuelas para niñas y mujeres fueron clausuradas y el velo se convirtió en obligatorio para las mujeres.

El legado de Soraya Tarzi

En un país con costumbres ancestrales, Soraya Tarzi supuso toda una figura de la revolución femenina. Defendió, como hemos visto, la educación de las mujeres, su derecho a no usar velo y luchó contra la poligamia. A día de hoy, el pueblo afgano aún recuerda sus discursos y la forma en que animó a las mujeres afganas a ser independientes, a aprender a leer y a escribir

Soraya murió en 1968 durante su exilio en Italia, y a pesar de que las reformas propuestas por el matrimonio fueron rescatadas en los años 70, Afganistán se enfrenta de nuevo a un fuerte ataque contra los derechos humanos. 

El recuerdo de su figura revolucionaria pone de manifiesto el increíble retroceso que significa el regreso del régimen talibán al poder afgano.