Febrero fue el mes del cine, el momento en el que los grandes estudios del mundo rindieron un homenaje a las mejores películas del año. Y todo ello terminó desembocando en los Oscars, los premios de la cinematografía estadounidense, que este año venían más cargados de polémica que nunca. La razón de ello es que Natalie Portman, nominada por su interpretación de Jackie, se había quejado de que en Hollywood hay cada vez menos mujeres y estas cobran mucho menos que los hombres, algo que han secundado otros actores y actrices de Hollywood.
En medio de toda esta polémica, lo cierto es que los premios de la Academia de Hollywood quisieron nominar algunas películas con personajes femeninos fuertes y de gran personalidad. Una de las más destacadas, pues está basada en hechos reales, es Figuras Ocultas.
La carrera espacial tuvo nombre de mujer
La película Figuras Ocultas sigue la historia de Katherine Goble Johnson, Dorothy Vaughan y Mary Jackson, tres matemáticas afroamericanas que trabajaron en los años 60 en la NASA. En plena carrera espacial entre Estados Unidos y Rusia por llevar al primer hombre a la Luna, estas tres mujeres consiguieron ver los errores que se estaban cometiendo, estableciendo las soluciones necesarias para que finalmente, Estados Unidos se llevase la gloria.
No obstante, aunque esta es la historia principal de la película, son mucho más interesantes las subtramas que trata, y es que a principios de los años 60, no era muy normal que una mujer trabajase fuera de su casa, que lo hiciese en la NASA y que además, fuese afroamericana. Una serie de factores que dan para una gran crítica social, pero que la película decide tratar de forma mucho más naif y humorística. De esta forma, se crean escenas en las que un trabajador de la NASA confunde a una de las protagonistas con una limpiadora. Esto puede tener cierta gracia dentro de la película, pero si te pones a reflexionar sobre ello, es algo bastante duro.
Figuras Ocultas, una película muy actual
Nunca un título dijo tanto con tan poco. La elección de Figuras Ocultas como nombre del filme, resume no solo el argumento de una película, sino una realidad que muchas veces permanece oculta a la vista: las personalidades femeninas han quedado opacadas a lo largo de la Historia, pese a que han formado parte de ella y han ayudado en su creación.
En este caso, fueron muchas las personas, tanto hombres como mujeres, las que con su trabajo permitieron a Neil Armstrong dar ese gran paso para la humanidad. Un trabajo que quedó oculto, pues fue finalmente él la estrella del suceso. En muchas ocasiones se alza a la gloria a algunas figuras masculinas, mientras que las femeninas son totalmente omitidas, como podemos ver, por ejemplo, en la literatura. Si te pones a pensar en los grandes literatos clásicos, una gran cantidad de nombres masculinos vendrán a tu mente, pero ¿qué pasa con las mujeres? Sus escritos son tan buenos como los de los hombres, pero la historia ha querido que sean los hombres los que sigan gozando de un reconocimiento mundial. Y que haya muchas mujeres que hayan triunfado escribiendo con seudónimo masculino.
Es por todo esto que Figuras Ocultas resulta una película imprescindible, pues no solo nos permite conocer una parte de la historia que nos era desconocida, sino que nos descubre la importancia de reivindicar nuestro trabajo. El trabajo en equipo no equivale a dejar en la oscuridad los méritos de ciertas personas, ni a que un tercero, una “figura visible” se lleve la gloria del trabajo de otros. Figuras Ocultas es una película histórica, pero su argumento es más actual que nunca.
Pilar Benítez, mujer todoterreno
Traductora jurada y amante del poder de la palabra
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